El ajo granulado es el condimento que se obtiene al picar los dientes de ajo ya deshidratados. Se trata de un producto que no llega a ser un polvo muy fino, sino que es algo más grueso.
El sabor es picoso y en la cocina se emplea como un saborizante natural. Posee un aroma muy característico que suele acompañar ciertos platos de la gastronomía mediterránea.
La cebolla deshidratada es un ingrediente que es el resultado de someter a las cebollas frescas a un proceso de secado hasta perder todo el agua que las componen. El sabor y aroma de este producto es el mismo que el de esta verdura en su estado normal, aunque algo más concentrado.
La cebolla granulada es una de las formas en las que podemos encontrar este vegetal para usarlo en la cocina. Se trata de cebolla deshidratada presentada en forma de granos o escamas tras triturarse sin llegar a ser polvo.
El sabor de la cebolla granulada es exactamente el mismo que el del producto fresco, así como el olor y sus propiedades. Es un producto natural.
Los piñones españoles son frutos pequeños, ovalados y de color blanco que se obtienen del pino piñonero. Este producto procede de Castilla y son 1º calibre, considerado el mejor piñón.
Se trata de un ingrediente valorado en la cocina mediterránea. Se añaden habitualmente a carnes, pescados, ensaladas, verduras, postres…
La sopa juliana deshidratada es un mezcla de verduras desecadas para su cocción. Los ingredientes, 100% naturales, son: zanahoria, cebolla, puerro, chirivia, perejil y col blanca. Se trata de una mezcla seleccionada de hortalizas de calidad que son deshidratadas para que su preservación y su uso sea mejor, conservando todas sus propiedades.
El tomate en polvo es un condimento de origen 100% natural que se obtiene tras titurar los tomates deshidratados.
Este tomate molido se emplea para la preparación de salsas, sopas, guisos, cremas o sofritos, así como para condimentar carnes o pescados, entre otros muchos usos.
Los tomates secos son los vegetales maduros deshidratados al sol durante días, dando lugar a un tesoro culinario clave en la cocina mediterránea.
Ofreciendo un sabor dulce y concentrado, estos ingredientes son ideales para acompañar platos de carne, pescado, ensaladas, tostas, pasta y arroces, entre otros.